TENDENCIAS PARA HOMBRES

Aunque la moda femenina es la que más variaciones y estilos presenta cada temporada, no hay que olvidar que los hombres también muestran cada vez más interés en los cambios de las tendencias y de su indumentaria.

TENDENCIAS EN PASARELA

Esta temporada, tanto en las pasarelas nacionales como en las internacionales, se observan tendencias de estilo muy claras: Estilo y cortes muy masculinos, con líneas que estilizan y patrones desestructurados, como los de Elio Berhanyer e Ion Fiz, destacando en este último los cárdigans y las prendas en ante.

La prenda it de la moda masculina es el blazer. Para combinarlo ofreciendo un resultado de forma muy casual, lo mejor es que sea de uno de los dos materiales poco usuales en él, como el algodón o punto.





Estilo muy cómodo y sport. Gracias a americanas Narmadas con los bajos deshilachados, los tejidos acolchados y, para los días de más calor, las usuales bermudas, Devota&Lomba apostó por un look cómodo. Pero no es el único, Francis Montesinos, por ejemplo, aporta un toque hippy inspirado en la Ibiza de los años de 1960-1970. Los bolsillos de plastrón, las capuchas, las arrugas intencionadas y las alpargatas con cordones son las opciones que ofrece en este estilo Adolfo Domíguez. Mientras que para Marc Jacobs ese estilo informal y desenfadado se logra con diseños holgados, pantalones más cortos de lo habitual, colores muy claros para los trajes, y las rayas y los cuadros. Además, las corbatas se han de llevar casi sin anudar, para mayor comodidad del usuario.


Custo presentó en Nueva York una colección inspirada en líneas arquitectónicas y en crear una imagen muy informal e incluso desaliñada.

  • Estilo militar. La inspiración del estilo militar es una constante de las colecciones masculinas. Esta temporada destacan los abrigos estilo oficial de marina y los elegantes y clásicos de siempre en colores como el caqui. Burberrys o Marc Jacobs apostaron por este estilo en sus colecciones. 

Característico del estilo militar, el color verde caqui se convierte en el protagonista, dejando sitio también a los tonos grises, blanco y azul marino.




  • Estilo motorista. La influencia motorista quedó patente en chalecos, pantalones, chaquetas y abrigos, como los de Bailey. Si se desea darle un look algo más rockero, las cazadoras de cuero, las tachuelas y los pantalones pitillos son imprescindibles.

Bailey combina los chalecos de motorista, con cueros de motocross y camisa safari.

Entre los colores, al igual que en las colecciones femeninas, destacan los tonos vivos, como el azul en todas sus tonalidades, el fucsia, el verde o el amarillo y, como contraste, los más suaves, como el gris y el blanco, bien solos o combinados con los fuertes.






PROPUESTAS DE MARCAS COMERCIALES 

En cuanto a las tendencias masculinas en la calle, H&M propone mezclas entre el estilo militar y la ropa deportiva, consiguiendo así la comodidad en sus prendas.


Los pantalones de algodón deportivos combinados con chaquetas, camisas y calzado de calle son un ejemplo de dicha mezcla en pos de la comodidad.

Las americanas de cuello mao, que recuerdan dicha inspiración militar, y las bermudas en todos los estilos, algunas muy cortas, son los protagonistas de la colección de H&M.

Zara, por su parte, apuesta, como el año pasado, por el estilo vaquero. Las camisas de cuadros, bermudas y alpargatas regresan sin ser una novedad con respecto a la primavera-verano del 2010.






Para los días de frío, las cazadoras de ante combinadas con punto siguen siendo un clásico. En esta línea, Zara, como H&M, sigue el estilo militar y para los días frescos ha creado abrigos militares de color negro o gris.

En cuanto a cazadoras se refiere, para aquellos que quieran una prenda más informal que los abrigos, solo hay una protagonista de la temporada: la cazadora de cuero.

La tendencia principal masculina es la mezcla de sastrería con piezas informales y cómodas, y el uso de los accesorios más deportivos.

Todas las imágenes están extraídas de http://www.zara.com/

LA MODA Y TÚ

PRENDAS QUE ADELGAZAN

Podemos decir que se puede estar guapa e ir a la moda aunque no se disponga de un peso ideal. Simplemente hay que conocer nuestro propio cuerpo para saber sacarle todo el partido posible, disimulando esos kilos de más. Por ello, a continuación proponemos unos consejos o trucos de cómo vestirse para parecer más delgada.

Afortunadamente, existen numerosas estrategias de estilismo que resultan unas importantes aliadas para dejar de lado los complejos, que generalmente se relacionan con tener barriga de más, poco pecho, poca altura y caderas anchas, entre otros. Así, es conveniente tener en cuenta las siguientes cuestiones:
  • No mezclar colorido, utilizar colores enteros. Si se emplean prendas de un solo color o de iguales tonos, se crea un efecto óptico de altura y al “alargar”, se estrecha la figura, pareciendo más delgada. Este verano los colores vivos vienen pisando fuerte, así que es el momento propicio para apostar por ellos, pero con prendas de un solo color y jugando con los complementos.
  • Estampación de tejidos. Al ser verano, se suelen emplear prendas más coloridas, estampados de todo tipo (flores, frutas, rayas etc.). Pero, si lo que se busca es aparentar mayor esbeltez, hay que desterrar las telas con diseños grandes, grandes estampados, ya que éstos, suelen engordar. 

Por otro lado, se lleva el eterno estilo marinero en todo tipo de prendas, chaquetas, camisetas, blusas, pantalones, bermudas, bikinis, etc. Para poder emplearlo si se tienen unos kilos de más, solo hay que saber que las líneas horizontales “engordan” y las verticales “adelgazan”; por lo tanto, se pueden elegir prendas marineras con rayas verticales, que estilizan y adelgazan.

En cualquier caso, no hay que obsesionarse con el color negro; se puede experimentar con colores y diseños, únicamente hay que saber combinarlos para disimular y realzar todo lo que se desee.
  • Los tejidos. Los tejidos son muy importantes, sobretodo en esta época del año. Por lo general las telas gruesas engordan, aunque en verano no se emplean muchas telas gruesas, son todas más bien ligeras o de algodón. Así, hay que elegir tejidos “flojos”, pero con cuerpo. Si lo son en exceso (efecto “baba”), se consigue que los defectos se noten mucho más. Del mismo modo, una prenda de algodón ajustada, que se pega muchísimo al cuerpo, quedando como una malla, lo marca todo. En definitiva, los extremos, como en todo, no son buenos.

Por tanto, con las prendas muy flojas o muy pegadas al cuerpo lo único que se consigue es el efector contrario: en vez de disimular y adelgazar, resalta más el sobrepeso. Utilizar una talla más pensando que así se disimula es un error porque se logra lo contrario; al igual que utilizar tallas más pequeñas, que hará que las prendas se peguen mucho y marquen más los defectos.
  • Resaltar las partes del cuerpo más bonitas. Una vez seleccionada la parte más bonita, se elije la ropa que favorezca y resalte dicha parte. Esto hará que los demás se fijen más en esa zona bonita, pasando más desapercibidas las zonas que lo son menos. En definitiva, se trata de desviar la atención a la zona bonita del cuerpo.
  • Disimular tripa. Disimular la tripa es una preocupación muy habitual en las mujeres, deshacerse de los “desagradables” rollitos. Así, hay que aconsejar el uso de vestidos, prendas sueltas, blusones y nunca, cinturones en la cintura. La ropa tiene que intuir la cintura, pero evitando atraer la atención al vientre. Asimismo, hay que evitar pantalones con pinzas. Como se ha indicado, es preferible utilizar ropa floja, suelta, que no se pegue mucho al cuerpo y, si puede ser, que no tenga mucha forma.


    • Caderas anchas. Para las caderas anchas, hay que evitar las prendas ajustadas y chaquetas o camisas que lleguen exactamente a la altura de la cadera o por la cintura. Es preferible emplearlas algo más largas, para alargar a su vez la figura, pareciendo más esbelta y delgada.


      Este año se llevan las faldas con vuelo. Si se elijen faldas evasé, que marquen la cintura pero con tejido rígido y acampanada un poquito, no se sabrá si lo que hay debajo es ancho o estrecho. Sirven tanto para personas que no tienen caderas como para las que las tienen anchas, ya que no se define el contorno. Si hay que tener en cuenta que no son convenientes cuando existe sobrepeso. Otras opciones para disimular el ancho de caderas son los tops holgados y vestidos baby doll.



      • Aumentar o disminuir el pecho. Es sumamente importante elegir la talla adecuada de sujetador. Si se quiere aumentar el pecho, hay que utilizar copas que sean rígidas, mejor con un poco de relleno, e utilizar frunces en las camisas, camisetas etc., así como emplear vestidos con cortes debajo del pecho que “enmarcan” el busto y escotes no muy abiertos. Por el contrario, si se busca disimular el exceso de pecho, se debe elegir una talla de sujetador adecuada y con una forma que favorezca, es decir, que recoja bien el pecho y que lo cubra bastante para que no quede sobresalga el exceso de pecho en la parte superior. Hay que tener cuidado con ceñir mucho las tiras del sujetador en la espalda, ya que harán que se formen rollitos; y las del hombro, que subirá demasiado el pecho, dando una sensación de todavía más volumen. Por lo tanto, se debe colocar el pecho de forma natural, a su altura, o subiéndolo un poquito, pero no demasiado, que quede natural.
      Además, el escote perfecto para parecer más delgada es el escote en V, disimula el pecho grande y afina el rostro. Nunca se recomendarán escotes palabra de honor o de los tops estilo halter, es decir, que se atan al cuello, ya que ensanchan la parte superior.






      • Culo prominente. Para disimular un trasero prominente, lo mejor es apostar por los pantalones rectos con bolsillos traseros, que disimulan el volumen, y si tienen bordados en esta zona, mucho mejor. Además, el pantalón recto ofrece sensación de cintura delgada y alargamiento la pierna, estilizando la figura. Se evitarán los vaqueros de cintura baja y los cinturones muy anchos, ya que llaman muchola atención sobre esa zona, así como los pantalones pitillos, siempre es mejor los que tienen el bajo un poco mas ancho. Y si se emplea cinturón con el pantalón, siempre del mismo color que este. Pero mejor que los pantalones es aconsejable el uso de las faldas con vuelo. Si se trata de una clienta con cadera ancha y bastante trasero, hay que aconsejar faldas anchas y sobre todo con vuelo, siempre por debajo de la cadera.
        • Vestidos sueltos. Ya que este verano son tendencia, se puede aprovechar para aconsejar los vestidos sueltos, con lo que se conseguirá ir fresca, cómoda y disimulando aquellas partes menos bonitas de su figura. Es lo más “in” de la temporada y hay que aprovecharlo.




          • Calzado alto. Aunque en verano hace mucho calor y los pies se hinchan y piden comodidad, es muy importante aconsejar el uso de tacones. Estilizan las piernas y la figura; es muy grande la diferencia de una persona con el pie en el suelo a llevar unos buenos tacones. Esto no quiere decir que se empleen constantemente tacones de aguja, la moda es infinita y son tendencia los zapatos con cuñas, que resultan muy cómodos y proporcionan la altura precisa para lograr la esbeltez buscada. 
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          CÓMO DISIMULAR LA TRIPA

          Existen algunos trucos que permiten vestir a la moda empleando prendas que ayuden a disimular la tripa. A continuación se indica qué forma de patrón es la adecuada y cómo aplicarlas a las tendencias de esta temporada: 

          PANTALONES

          Para disimular tripa deberán ser con cinturilla ancha o que se abrochen en un lateral en vez de delante. Otra buena opción es emplear pantalones a la cintura, que, además de disimular la tripa, evitarán que se forma el antiestético michelín. Por otra parte, pantalones bajos de cintura, justo por debajo del ombligo, consiguen que la tripa tenga menos volumen. 

          En cuanto a los shorts, se puede pensar que con tripa no se pueden utilizar, pero ¿por qué no? Lo que siempre hay que tener en cuenta es que sean siempre de tiro bajo, sobretodo si se lucen unas bonitas piernas.






          El mono es la prenda it de esta temporada. Te sentirás más cool  eligiendo un mono con pantalón caído o estilo moruno.

          FALDAS

          Al igual que los pantalones, las faldas disimulan la tripa si se abrochan en un lado; si además tienen cinturilla ancha, mucho mejor. Como tendencia para esta temporada, se puede optar por una falda de vuelo por encima de la rodilla. 





          Si eres de cintura estrecha y con tripita, es conveniente aprovechar las tendencias mas in y utilizar faldas de mucho vuelo, de tejido rígido, abrochada a la cintura, incluso muy mini (tendencia total) si tienes unas piernas bonitas. De este modo tu problema de vientre hinchado quedará camuflado debajo del vuelo de la falda porque se centrará la atención en la falda y en la parte inferior de tu cuerpo, no en el abdomen.

          Evidentemente lo que siempre se debe evitar es la falda tubo, sean del tejido que sean, ya que el efecto es el de marcar aún más las zonas prominentes.

          VESTIDOS

          El vestido adecuado por excelencia es el estilo imperio: cortes debajo del pecho que también se puede aplicar para camisetas, camisas, etc.

          Otra forma de vestido muy favorecedor en estos casos es aquel que tiene una goma sobre la cadera, ya que evita marcar la zona de la tripa quedando esta disimulada entre el “vuelo” de la tela que produce la goma.





          Según las tendencias de esta temporada, se aconsejan los vestidos más hippies o con nido de abeja en la zona del pecho, ideales para estas ocasiones. Este tipo de vestidos se pueden lucir en el estampado que se quiera y a todo color, tendencia fuerte de esta temporada, eligiendo el fucsia, azul turquesa o el color protagonista de todos los veranos que es el blanco.

          Otra opción es el vestido cruzado con costura bajo el pecho, ayudan a disimular la tripa y realza el pecho, desviando así la atención. Como los anteriores, tiene que tener estampados muy cargados, para disimular, y si se elige en un color liso, que sea un color oscuro: azul marino, lila, granate o negro. 

          Nunca se deben usar vestidos de los que se cortan en la cintura, ya que acentuará más la barriga.

          Las formas perfectas que se deben emplear para disimular un vientre abultado son los vestidos de corte imperio, estilo babydoll, cruzados, globo y estilo jumper.

          CAMISETAS Y CAMISAS

          También se puede disimular la tripa vistiendo una camisa o camiseta ancha por fuera del pantalón, short o falda. Si a estas camisas anchas o incluso a una camisola se le añade un maxi cinturón caído sobre la cadera, quedará un efecto perfecto.






          En estos casos, los colores lisos son los más adecuados. Los estampados habrán de ser muy suaves si se quieren utilizar.

          BLAZER

          El blazer o chaqueta se puede emplear para disimular tripa sobre vestidos o blusas. Lo importante es que sea entallado, afinando la cintura y resaltando la silueta, y por supuesto largo hasta las caderas, nunca por la cintura.







          En cuanto a los colores, la mejor opción son los colores oscuros, que logran un efecto óptico que estilizará más la figura, pasando por inadvertida tu tripa. 

          Aprovecha que el blazer es una de las prendas estrellas esta temporada, haz diferentes combinaciones y olvídate de la incómoda tripa. Es una perfecta herramienta para disimularla.

          ROPA INTERIOR

          Aunque no lo parezca, saber elegir la ropa interior adecuada es una cuestión esencial. No porque no se vea es menos importante; según el modelo que se elija, se puede conseguir que un pantalón o una falda quede de maravilla o que no te la puedas poner.


          Hacer una buena elección de ropa interior puede ayudar a mejorar mucho y estilizar la figura. Los tangas resultan muy poco prácticos; es mucho mejor optar por otro tipo de prendas que sujeten más y que incluso puedan ocultar la tripa, como por ejemplo las bragas-fajas. En definitiva, se trata de evitar utilizar prendas que marquen la cintura.

          Asimismo, es esencial acertar con la talla. Una talla más pequeña podría resaltar más algunos defectos y parecer vulgar. Por el contrario, si se ofrece una talla superior, se proporciona más volumen, dando la sensación de que el tamaño del vientre es mayor.


          BAÑADORES Y BIKINIS

          Sin duda, lo “peor” del verano cuando se tiene tripa es el momento de lucir bañador o bikini. Pero hay que conseguir acabar con esos miedos y lograr sentirse contenta y feliz.

          Los bañadores enteros o trajes de baño son los que mejor disimulan la tripa. Los que son estampados o de colores fuertes son ideales, ya que el vientre quedará camuflado entre los dibujos y colores del bañador.


          Pero hay que tener en cuenta que, si además de tripa, se tienen unos kilitos de más, se deben evitar los estampados porque estos proporcionarán más volumen; la solución pasa por seleccionar los que son de un solo color o emplear como arma el efecto óptico que producen las rayas verticales, estilizando y adelgazando la figura.

          En el caso del bikini, se utilizarán aquellos que no sean de cintura baja. Hoy en día existe gran variedad de diseños de bikinis, por lo que una opción perfecta para este caso es optar por bikinis que, por ejemplo, incorporen un cinturón: no solo disimula la tripa, sino que también lo hace con el trasero y está muy de moda.

          En cuanto al color, un bikini de color liso es lo mejor para disimular, y el negro suele ser el que más estiliza.

          Por otra parte, los pareos resultan indispensables para los paseos por la playa o piscina y disimular tripa, caderas, muslos y culo. Permiten moverse con total seguridad sin enseñar todo. Eso sí, hay que saberlos colocar con gracia.

          Para regresar a casa desde la playa o piscina o ir comer a algún sitio, es recomendable que en vez del pareo se utilicen vestidos tipo caftán o kurtas, por la rodilla, sueltos, que dan un aspecto más arreglado aunque se lleve el bikini o bañador debajo.




          En definitiva, no hay ningún "defecto" que no se pueda disimular con la elección de las prendas adecuadas, sin dejar por ello de seguir las tendencias y conseguir que se vaya a la última.


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